viernes, 23 de mayo de 2014

Como una flor en verano se siente mi corazón, alegre aunque sabe que le espera una dura batalla de supervivencia.

Pues el tiempo pasa y van llegando batallas que combatir, batallas que nos pueden undir o nos pueden ayudar a eludir la malvada y poderosa incertidumbre. Aunque no lo parezca vive en nosotros y a la que bajamos la guardia florece como una flor con espinas.

Con una coraza en el corazón, con un antes y un después, y con la espada de la sabiduría blandimos esta lucha día a día.

La vida es dura pero si hay algo que en mi perdura es la esperanza del "ahora".